T R O Y A

Basado en el poema épico La Iliada de Homero. Es sin duda alguna la mejor película épica que se haya visto, ya sea por el espléndido guión, la dirección, la calidad del reparto, el vestuario, la banda sonora y lo convincente que resulta. La película no solo se basa en peleas coreografiadas, si no que resalta la grandeza de los pueblos de hace años, demuestran que no solo había guerras por conquistas y conflictos políticos, también habían guerras por la honra y el honor. Además de introducirte personajes interesantes como: Aquiles (Brad Pitt), un mercenario que no luchó por su patria si no por hacer historia, para ser recordado y su nombre quede inmortalizado. Hector (Eric Bana), príncipe de Troya y el mejor guerrero de su pueblo, fue el único que le hizo pelea a Aquiles. Además de personajes como Paris (Orlando Bloom), Helena (Diane Kruger) y Briseida (Rose Byrne). Hay muchas escenas inolvidables, de todas podría citar tres: cuando Aquiles se dirige al castillo de Troya, solo, en busca de venganza por la muerte de su primo Patroclo y se detiene a unos metros de la puerta y grita: "¡Hector!, ¡Hector!, ¡Hector!". La muerte de Menelao en manos de Hector, ya que Paris perdió la batalla y huyó cobardemente provocando la guerra entre Grecia y Troya. La escena en que Aquiles le dice a Briseida: "Tu me has dado paz en una vida de guerra". Tremenda película épica comparable a todas las películas de su estilo de cualquier época, buena interpretación de Brad Pitt dándole un toque frío a su personaje y especialmente Eric Bana en su papel de Héctor. Lo único que puedo decir de este film es que son casi 3 horas de puro espectáculo con momentos inolvidables de puro cine épico para los grandes aficionados.

Partiendo de que me entusiasma la historia, no es ilógico pensar que me ha encantado la película. Es puro espectáculo de principio a fin, no se hace en absoluto larga. Las escenas bélicas están fenomenalmente hechas, los diálogos tampoco desentonan y han sido cuidados. Puede ser cierto que no se ciñe cien por cien a la historia real que nos cuenta "La iliada", pero es lo de siempre: ¿es eso realmente importante? También me ha gustado la música, y la elección del reparto... No le veo fallos a la película y la veré con frecuencia. Y por cierto, en la comparación con "Gladiator" que hacen muchos críticos,  para mí correcto. Quizá adaptar la Iíada es difícil. Pero seamos realistas.... Dejando alguna actuación un poco decepcionante, estamos hablando de una de las mejores películas épicas de la historia. No comparto las críticas hacia Brad Pitt, ya que pienso que su actuación es muy buena. En realidad podemos pensar que Aquiles era así, un guerrero hecho de músculos con largas melenas y con un cerebro vacío. Y que decir de los demás. Eric Bana y Diane Kruger están realmente magníficos, como casi todos los demás. La película no se queda corta de largometrajes premiados en los Oscar como Braveheart o Gladiator. Además así fue la guerra de Troya y todo lo que supuso para los Griegos. Otro tema a destacar es la espléndida banda sonora, con una canción que llega al corazón, "remember me". La música está perfectamente adaptada a la época en que se hizo. Y decir que como único punto negativo, la actuación un poco decepcionante de Orlando Bloom, que aunque interpreta bien el papel de Paris, su falta de cara expresiva hace que te pierdas un poco...Por lo demás, Troya es una película que será recordada perfectamente.

La película de Wolfgang Petersen se benefició de tantas circunstancias favorables como desventajas a la hora de ponerla en práctica, por un lado el efecto “Gladiador” ofreció la posibilidad de ampliar horizontes comerciales hacia un cine que parecía desaparecido, por otro el resultado económico debería estar acorde a la inversión y por lo tanto estaba obligada a obtener unos buenos beneficios. La mano del director supo aunar espectáculo al lado de una interesante historia, noble y sin endulzar, razonando las causas y motivaciones de sus personajes, tomándose su tiempo y dando grandes dosis de genialidad artística. Si para entonces ya estábamos acostumbrados a las batallas como en Braveheart o Gladiador, “Troya” nos envolvió dentro de los límites épicos de la leyenda por lo que Petersen tuvo tiempo para tomarse sus licencias personales basadas en la “Illiada” de Homero. “Troya” regresó recientemente con una nueva versión que incluía 30 minutos más de metraje, que si bien no cambiaban la historia de manera radical, sí que la acentuaba en sus aspectos más violentos, enardeciendo y dando más cuerpo a las historias de sus principales protagonistas. Nos queda así un film de estudio meticulosamente trazado en el que no falta el espectáculo como arma principal. Sus bazas fundamentales, están no obstante cimentadas sobre los papeles de Brad Pitt  y Eric Bana, oscureciendo y pasando por encima de la historia entre Helena y Paris que es sin embargo el hilo que da argumento al objeto de lo sucedido. A pesar de todo es la personalidad y el choque interpretativo entre Pitt y Bana lo que mejor funciona en el film. Con una música que se me asemeja a los grandes clásicos con una mezcla moderna, bastante más apropiada de lo que se ha criticado. Un gran film de aventuras que propone toda serie alicientes propios del género. Brad Pitt para algunos que no saben mucho de cine es considerado un actor muy atractivo sin talento. Pero muy al contrario ha hecho grandes papeles en grandes películas, como el Club de la Lucha, Babel, Snatch, Spy Game, 12 monos, Sleepers y alguna más que me dejaré por el camino. Para algunos la manera de combatir les parecerá una fantasmada pero es realista. En las guerras de la antigüedad donde se combatía cuerpo a cuerpo, la gente que sobrevivía a muchos combates debería de combatir de una manera especial y en la película la forma que tiene de pelear es posible. Dejando todos estos temas aparte, la película cuenta la batalla de Troya que es un hecho histórico y casi todos los héroes de la película son bastante conocidos al igual que la batalla. Esta película es una de mis favoritas, si te gustan las buenas películas no te la puedes perder.

Troya de Wolfgang Petersen, fué una grata sorpresa para mi cuando la vi en el cine, pero cuando esta grandiosa película terminó, quedé lastimado después de ver uno de los finales más tristes que hollywood haya concebido, con un banda sonora imponente... La dirección es magnífica y el guión profundiza mucho en los personajes principales, secundarios y ayudantes. Me dio mucha tristeza el final... El tema de Josh Groban en los créditos finales fué tan poderoso... Troya esta en mi lista de las películas mas grandiosas que vi en mi vida. Excelente. El romance de Briseida y Aquiles, dejó a los amantes Paris y Helena en un papel secundario para muchos, pero la verdad de la forma en que está plasmado a la pantalla no deja tanta decepción. Orlando Bloom fué odiado debido a que al final mata al héroe, debido a que pensaba que estaba violando a su prima. Eso explica por que fué tan duro en matar a flechazos a Brad Pitt, además no olvidemos que Aquiles mató a su hermano mayor Héctor. La película no es fiel al libro de Homero... ¡ni pretende serlo!... ¿A quién le importa? Yo voy al cine a divertirme  y para mí Troya es un peliculón, porque llega al corazón. Se refleja muy bien la lucha del hombre por la inmortalidad, con escenas sublimes, intimistas, por parte de Aquiles. O momentos de gran valor como cuando el rey va al campamento extranjero a pedir el cadáver de su hijo. ¡Es una obra maestra!..¿Se puede saber cuántas películas logran desnudar así las emociones humanas y llegar al corazón? Y eso que se supone es una superproducción hecha sólo para vender. No seamos tan negativos, Troya, la película, entretiene y llega al corazón. Ojalá todas las superproducciones de Hollywood, fueran así.

Esta película debe verse en pantalla gigante, porque es una película épica. Eric Bana es el mejor Héctor: valiente, responsable y noble; amante de su patria y de su familia, es un hombre de paz que se convierte en héroe al defender lo que ama y encuentra la gloria en el proceso. Brad Pitt nos muestra un Aquiles de pies ligeros, cruel, imparable y viril. La historia no es para nada fiel al relato homérico, pero no hay razón para quejarse; el título de la película es Troya, no La Ilíada. No creo que haya muchas películas épicas que realmente sean muy fieles a las fuentes que las inspiran. Una notable excepción es La Ira de Aquiles, que parece respetar bastante la historia de Homero. Mucho más entretenida que Gladiador (remake de La Caída del Imperio Romano), es capaz de motivar la lectura de los clásicos grecolatinos. Es de mucho agradecer que Russel Crowe no interpretara a Aquiles. Lamento mucho que el irresponsable, cobarde y egoísta Paris se salvara al final; y que los dioses no aparecieran en acción, pues tanta tecnología digital permitiría intervenciones espectaculares de los olímpicos. En este sentido, ahi esta Furia de Titanes. Si a mi me preguntasen si una de las dos partes de Troya es mejor que la otra, hace unos años habría dicho que la I, pero tras revisionarla varias veces, me he dado cuenta de que no pueden separarse, pues las dos alcanzan unas cotas de perfección en todos los aspectos casi nunca alcanzadas en el cine. Son dos historias aparentemente independientes una de otra, pues ocurre en lugares distintos, los protagonistas cambian en su gran mayoría y las tramas son diferentes. Pero hay un nexo de unión: Aquiles. Ambas nos muestran a Aquiles en sus altas esferas, pero esta segunda parte nos muestra sus consecuencias. Aquellos que decían que la primera parte glorificaba a los semidioses tuvieron su reprimenda, pues esta cinta muestra para mi el desencanto del propio Aquiles con su famosa trilogía, pues hizo la película casi obligado, y estuvo a punto de ser sustituido. Mucho más oscura, y con una trama quizás más negra y complicada, Petersen nos empieza mostrando a un Aquiles en el cénit de su poder, temido por todos, y nos lo acaba demostrando desgarrado por el dolor, convertido en un asesino que no tienen en cuenta ni la propia sangre, y anteponiendo la Familia a la familia. El hace las cosas ciegamente, pensando en que eso puede beneficiar, cuando en realidad lo que hacen es distanciarlo más y cuando se da cuenta es demasiado tarde... Y a todo ello se le añade el nacimiento del primer Aquiles. Una historia que por sí sola alcanza una profundidad que para sí quisieran bastantes películas. Y una ambientación única, que sirve de contraste para mostrar las formas de ser de padre e hijo, uno basado en el honor, y el otro en el mero asesinato y el miedo. Aunque también esta película es una crítica a una sociedad griega que ocultaba sus problemas bajo una capa de corrupción de la que poco se sabe.

La manera tan perfecta con que nos cuenta ambas historias y las une son dignas de una tesis, ya que jugar así con el tiempo de una película sólo está al alcance de muy pocos privilegiados. Amén de un apartado técnico que quita el sentido. Una película perfecta, acompañada de un diseño de producción único, una banda sonora primorosa, una fotografía excepcional, y el ya comentado montaje. Si interpretar a Aquiles no fue fácil, el hacerlo una segunda vez y por otro actor es digno de alabanza. Y cómo no, Aquiles. Que Aquiles no ganara el oscar es sencillamente de broma. Su interpretación es de las mejores de la historia del cine. Excelente película donde se presenta principalmente un espectáculo épico de dos horas y media de los de pantalla grande, a la vieja usanza, de sandalias y carromatos, no importa lo bien que esté filmada, una batalla es como la siguiente, siendo incluso a veces difícil recordar quién está luchando por quién y por qué. Hacia el final de "Troya", incluso Aquiles parece ansioso de que termine el combate. Es a la vez vigorosa, robusta película épica donde mezclan la 'amplitud' del ejército con las emociones íntimas, el honor y la obsesión, el romance y el machismo, para mostrar el glamour y la locura de la guerra. Con esta película se conoce sobre el pasado aspecto fundamental para comprender el pasado, recomiendo que la vean  para que aprenda lo que son las buenas películas. Es un film de estudio desde el principio hasta el final . Es una película plagada de escena míticas , muchas peleas mano a mano , la gran guerra entre tropas , un Brad Pitt que cada día que pasa es más perfecto en todos los sentidos , tanto como por su forma de actuar como por su belleza , un Eric Bana soberbio , grandes actuaciones de lujo y sobre todo la grandiosa puesta en escena con la que nos deleita el magnífico Wolfgang Petersen . Una maravilla del cine , que con el paso de los años espero que será recordada gratamente . La película no se ha adaptado del todo a la historia, pero no queramos ver todo tal y como ha pasado, es un film de culto...los amantes del cine me entenderán.

Para los que no os ha gustado porque consideráis que es mala adaptación, simplemente deciros que las productoras se limitan a ofrecer productos para entretener a los espectadores, no para enseñarles historia, todavía no he visto ningún libro en los cines. Entonces teniendo en cuenta que el objetivo es entretener, "Troya" lo cumple a la perfección. Tiene muy buena acción con grandísimas peleas, de las mejores a espada que recuerdo. En cuanto a interpretación creo que todo el mundo coincide en destacar a Eric Bana y Peter O´Toole. Muy buenos también los efectos especiales y los diálogos, algunos como entre Aquiles y Agamenón. Tras el éxito de “Gladiator” y la épica de espada y sandalia de los años 50 y 60 parece florecer de nuevo en este siglo XXI. Lo más palpable de “Troya” es que, al igual que muchas producciones recalca su carácter y su exhibición pseudogay con un panorama hombruno que recupera cuerpos esculpidos a conciencia como los de Steve Reeves, Gordon Scott o Mark Forest. Es una lástima que en este film el papel de la mujer sea tan escaso y su participación se reduzca a intervenir a lo largo de toda la historia al margen de que no existan féminas en este relato que puedan compararse a Virna Lisi, Rossana Podestà o Sylva Koscina. Brad Pitt ejerce de héroe principal en el papel de Aquiles, egocéntrico, narcisista, luce piel bronceada y melena al viento...  El problema de muchas grandes estrellas de Hollywood es que a pesar de ser buenos actores, como lo es Pitt, todavía no tienen el calado interpretativo para sobreponerse a su estatus y dotar de personalidad propia a un personaje de renombre como el que aquí encarna. Sabemos que Pitt está interpretando a Aquiles, pero más bien vemos a la estrella disfrazada de Aquiles que al propio Aquiles, hecho que mengua la conexión emocional con sus aventuras. Por su parte, Orlando Bloom y Diane Kruger, en unas mediocres caracterizaciones, hacen desencadenar la guerra de Troya.

El director Wolfgang Petersen  y el guionista David Benioff  manejan con libertad el recurso literario, reduciendo la complejidad psicológica que siempre otorgan los autores griegos y la vinculación mitológica, esencial en la existencia y destino de la Grecia clásica, para centrar su esfuerzo en construir un intrascendente pero entusiasta espectáculo con meritorio tratamiento épico (la intervención de O’Toole y la adorable Julie Christie parecen guiños a uno de los maestros de la épica cinematográfica, David Lean), sostenido por un buen trabajo en la fotografía, efectos digitales y dirección artística, una funcional partitura de James Horner y un tacto narrativo suficientemente controlado para impedir que las escenas de acción no terminen de engullir los códigos que definen la génesis de tales acciones, como el amor, el honor, el sacrificio, la gloria o la inmortalidad. Cuando la acción desaparece, la película se muestra a nivel íntimo, con diálogos y una vacuidad palpable en la penetración en los personajes, dejando expandir una historia que podía contarse en menos tiempo, y más tras simplificar muchos de sus asentamientos básicos para adaptarla... Esto último se consigue.

Troya es sin duda una de las mejores películas que nos muestra que tan importante es luchar por lograr ser reconocidos, no cabe duda que su trama nos ayuda a recordar ese hecho histórico que sucedió hace tantos años. Es una película de género épico que muestra a esos héroes que hoy recordamos y admiramos por las virtudes de luchar por el honor y por su respeto a sus seres queridos.

  Excelente a la hora de enseñar historia...

Tomar en cuenta esta película, que relata el hecho de forma espectacular y ha dejado un poso de obra de culto y esto es como un orgasmo para cualquier mitómano.

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